En respuesta, la compañía argumentó que la legislación brasileña no impide que cobre una tarifa por sus servicios.
 

Según el organismo, Apple impone "restricciones y dificultades" que limitan el acceso de otras billeteras digitales a la tecnología utilizada para pagos por contacto. Desde abril, el CADE investiga si estas prácticas constituyen una restricción indebida de competencia.
 

Hasta el momento, ningún banco ha habilitado el Pix por aproximación en iPhone, debido a que Apple cobraría tarifas para permitir el uso de su tecnología NFC. Aunque la empresa sostiene que ha permitido el acceso de terceros de forma "justa y consistente" a través de Apple Pay —con más de 40 bancos integrados—, en la práctica el servicio de Pix por aproximación sigue ausente en dispositivos iOS.
 

En contraste, el Pix por aproximación está disponible en celulares Android a través de Google Pay, funcionando de manera gratuita y abierta. Fuentes del mercado señalan que, dado que realizar un Pix tradicional no implica costo, el uso de NFC para pagos inmediatos también debería ser gratuito.

El Banco Central de Brasil aclaró que el Pix por aproximación es una funcionalidad "opcional y abierta a todas las instituciones", y que su adopción depende de las decisiones comerciales de cada empresa.
 

Por su parte, Apple argumenta que no existe monopolio dado que los iPhones representan apenas un 10% del mercado de smartphones en Brasil, y que "no hay evidencia de daño a los servicios de pagos móviles o a los consumidores brasileños".
 

Mientras tanto, la expectativa de llevar el Pix por aproximación a iPhone continúa en suspenso, y el servicio seguirá disponible únicamente para usuarios de dispositivos Android.