La medida impulsada desde el gobierno está enmarcada en el proceso de transformación del sistema de medios de pago del país, que se inició el año pasado, para crear un modelo "más competitivo", y que significa menores costos para el comercios y los emprendedores del país. De esta misma forma, los consumidores también recibirán menores precios y condiciones.

 

El Ministro destacó que con el proyecto "el objetivo es avanzar hacia una mayor inclusión financiera, incentivando un mayor uso y acceso de las tarjetas en la economía, con transacciones más rápidas, seguras, y muy importante, con un menor costo transaccional para los comercios".

 

En Chile existen más de 21,9 millones de tarjetas de débito; 16,7 millones de tarjetas de crédito bancarias y 3,9 millones de tarjetas de crédito de casas comerciales.

Al parecer la iniciativa no ha caído bien en todos los actores del mercado. De hecho, Mastercard, emitió el siguiente comunicado, donde realiza una advertencia:

 

“Respetaremos lo que en definitiva se resuelva en materia de tasas de intercambio. Como impulsores del modelo de cuatro partes en Chile, estamos disponibles para tener un rol proactivo para aportar con nuestra experiencia en todo lo que requieran las autoridades durante la discusión del proyecto.

 

Estamos alineados en que los objetivos de la tasa de intercambio deben buscar un equilibrio entre la emisión y adquirencia para lograr mayor competencia, más innovación y llevar los beneficios de los pagos electrónicos y la economía digital a un mayor número de comercios y consumidores.

 

Es importante hacer presente que el establecimiento de tasas de intercambio es complejo dada la naturaleza de mercado de dos lados de la industria de medios de pago, por lo mismo es necesario que, durante la discusión del proyecto, lo que se busque sea asegurar un equilibrio en el mercado y evitar que en definitiva se produzcan efectos indeseados que impliquen un mayor costo para los consumidores o que se inhiba la inclusión financiera por vía de reducción de incentivos para el ingreso de nuevos actores por el lado de la emisión. Asimismo se debe buscar el equilibrio necesario que permita una mayor penetración de pagos electrónicos, principalmente donde el efectivo es el principal medio de pago y no solo mirando el ecosistema actual sino a comercios que hoy no se benefician de la digitalización de los pagos.”

 

Fuente: Terra