A partir de septiembre, será obligatorio para todas las instituciones que tengan más de 3,000 cuentas de clientes.

 

Los bancos más grandes, como BBVA Bancomer, Citibanamex, Santander y Banorte, se han declarado listos para iniciar las pruebas. Sin embargo, de acuerdo con las declaraciones del  subsecretario de Hacienda, los beneficios no se verán en el corto plazo, sino que habrá que ver cómo vayan funcionando las pruebas piloto, y de ahí masificarlo a todo el país. Para ello habrá que esperar hasta 2020.

 

Con CoDi se busca reducir el uso del efectivo y  combatir la corrupción e informalidad, así como bancarizar a millones de mexicanos que hoy están fuera del sistema financiero formal.

Tres programas

 

Para empezar con el cambio de cultura en materia de pagos el gobierno federal, de manera conjunta con los bancos, ha decidido iniciar las pruebas piloto a través de tres programas segmentados según lo explicó hace unos días el subsecretario de Hacienda.

 

Uno de estos programas tendrá que ver con los apoyos gubernamentales dirigidos a los jóvenes, con una cobertura geográfica específica, dado que es el sector más familiarizado con los teléfonos inteligentes y nuevas tecnologías.

 

El otro programa piloto en el que se entrará a probar CoDi está relacionado con una comunidad de tamaño medio (alrededor de 150,000 habitantes), para ver cómo funciona a esa magnitud y cómo es adoptada la tecnología.

 

El tercer piloto se aplicará en una comunidad muy pequeña, donde prácticamente no haya servicios bancarios de ningún tipo. El resultado de las pruebas piloto en estas tres modalidades derivará en cómo se avance a nivel nacional.