De los 91 millones de adultos que hay en México,  9.1 millones tienen tarjeta de crédito, lo que representa un 10 por ciento de la población, mientras que la media mundial es de 18 por ciento.

 

Argentina, Brasil y Chile superan este nivel con 24, 27 y 30 por ciento,  respectivamente, niveles que quedan bajos cuando se comparan con Canadá, Israel y Noruega, donde la mayoría de la población cuenta con este instrumento financiero.

 

En esos países, la proporción es de 83, 75 y 71 por ciento. En México, los bancos están concentrados en otorgar tarjetas a quienes reciben sus ingresos en una cuenta bancaria y a quienes ya tienen uno o dos plásticos de este tipo.

Para alguien que no puede comprobar ingresos o que no recibe sus ingresos en una cuenta bancaria es difícil obtener una tarjeta. 

 

Según el Findex, en 2017 mil 809 millones de adultos en el mundo realizaron al menos una compra con su tarjeta de crédito o débito.

 

En 44 países que se caracterizan por tener población de ingreso alto, 80 por ciento de los adultos utilizaron su tarjeta, mientras que en 38 países donde la población tiene un ingreso medio alto, donde se encuentra México, 38 por ciento de los adultos usaron el plástico bancario para pagar sus compras.