En México MasterCard hace foco en la población no bancarizada
2 de Marzo, 2015 - México
Algunas empresas ven en la población desatendida por los bancos un negocio para ofrecerles medios de pago alternativos a las tarjetas de crédito y débito. Éste es el caso de MasterCard.
Este año MasterCard incorporará a su red a dos bancos “medianos en cuanto a número de tarjetas y cartera y que van a la base de la pirámide”, según Jorge Tamayo, titular del desarrollo de nuevos negocios.
Los nuevos integrantes se acoplarán en el segundo o tercer trimestre del año después de obtener la aprobación y certificación de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores.
Además, MasterCard integrará a su red de corresponsales bancarios una cadena de autoservicios más y una cadena de farmacias con 1.000 sucursales. La figura de corresponsalías pretende hacer accesible los servicios bancarios a través de canales alternos a las sucursales de los bancos.
En palabras de Tamayo, la compañía está interesada en afiliar a más bancos dado que así lo permite su plataforma tecnológica multibanco y multicomercio, sin importar su dimensión.
En los últimos días, MasterCard anunció que 7-Eleven se adhiere a la alianza con el banco Bansí y MercadoPago, con el fin de que sus clientes puedan hacer depósitos a través de sus tiendas en la tarjeta recargable que lanzaron en 2014.
Los usuarios podrán recargar sus tarjetas en las 1.900 sucursales de 7-Eleven. La cadena de tiendas cobrará una comisión de siete pesos mexicanos (0,47 dólares americanos) por transacción, en línea con otros servicios de corresponsalías similares con Banorte, Banamex, Bancomer y Santander.
La alianza surgió con el fin de resolver la necesidad de la población no bancarizada de tener un medio de pago para realizar compras vía Internet, aunque la tarjeta también puede ser usada en establecimientos fijos. MercadoPago las comercializa en su sitio de Internet y Bansí las opera.
Actualmente, el 64% de los usuarios de Internet no realizan compras electrónicas por no contar con una tarjeta de crédito o por el temor de compartir su información, según la Asociación Mexicana de Internet.
El costo de la tarjeta es de 6,65 dólares americanos e incluye el plástico y el envío. La tarjeta está catalogada como de nivel dos: sólo requiere nombre, dirección y CURP del cliente. Además, está ligada a una cuenta de baja transaccionalidad en Bansí y no necesita ser firmada.
“Cincuenta millones de personas no tienen instrumento bancario, nuestra plataforma de distribución nos permite llegar a una población amplia porque no necesitamos de red de vendedores”, comentó el director general de MercadoPago, Jorge Zazueta.
MasterCard comenzó a trabajar en 2013 con la sociedad financiera popular Te Creemos para emitir una tarjeta de débito de baja transaccionalidad y al día de hoy se han colocado 20.000 entre sus más de 100.000 clientes.
Fuente: CNNExpansión
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