A pesar de las numerosas innovaciones en métodos de pago, el 73% de los españoles afirma utilizar el cajero automático para disponer de efectivo como mínimo una vez por semana. Las principales razones que motivan el uso de efectivo en España son, por orden, un mayor control del gasto y la garantía que ofrece ante cualquier imprevisto dado que es el método de pago aceptado en cualquier establecimiento, de acuerdo con los datos del estudio sobre los métodos de pago llevado a cabo por Cardtronics, el mayor operador mundial de cajeros automáticos.
 

En cuanto a los hábitos de uso, el 87% de los usuarios entrevistados utiliza el cajero en horario comercial. Cada vez que acuden al mismo, retiran una media de 90 euros, una cantidad promedio que ascendería a 380 euros al mes. Supermercados y comercios locales, estaciones de transporte público, establecimientos de restauración y ocio, y farmacias son los puntos más comunes donde los usuarios tienden a pagar con dinero en efectivo.
 

La ubicación y accesibilidad son los factores más valorados por la gran mayoría de los entrevistados, hasta el punto de que el 72% afirma que estaría dispuesto a modificar sus hábitos de compra en función de la disponibilidad de un cajero automático en el establecimiento. Así, el 71% de los españoles afirma que preferiría encontrarlos en lugares que forman parte de su día a día –centros comerciales, supermercados, hipermercados, lugares de trabajo, estaciones de metro y ferrocarril o gasolineras– para una mayor comodidad y un mejor acceso al efectivo. Sin embargo, una de las conclusiones más relevantes del estudio es que el 40% percibe que cada vez hay menor número de cajeros disponibles.
 

Los resultados del estudio realizado por Cardtronics coinciden con los últimos datos publicados por el Banco de España en su informe trimestral sobre medios de pago. Según éste, se constata un aumento del 1,38% interanual en el número de operaciones de retirada de efectivo, y una variación del 3,66% interanual de los importes retirados hasta los 118.000 millones de euros anuales. Todo ello a pesar del cierre masivo de sucursales bancarias de los últimos 8 años, que ha supuesto una reducción del 36% de los puntos de servicio de efectivo.
 

Bajo este contexto, Cardtronics ha lanzado recientemente sus operaciones en España de la mano de EURO 6000, y está empezando a instalar cajeros automáticos en redes de transporte, centros comerciales y supermercados por toda la geografía española. Según Ramiro Sánchez-Crespo, Consejero Delegado de Cardtronics España: “Entendemos el acceso al efectivo como un servicio público. La voluntad de Cardtronics es cubrir el vacío existente entre la alta utilización del efectivo por parte de los consumidores españoles y la creciente dificultad para encontrar puntos de servicio”.
 

Fuente: El Mundo Financiero, España